Durante el verano una decena de alumnos del colegio Chapas-ECOS han participado en una experiencia de campo científica en plena zona ecuatorial, organizada por Operation Wallacea (Opwall), en el que participan una veintena de colegios de todo el mundo. Han convivido dos semanas con científicos de distintas universidades internacionales ayudándoles en sus tareas diarias de recogida y análisis de datos en áreas de elevada biodiversidad.
La primera semana la transcurrieron en plena selva amazónica a orillas del río Napo. Han conocido la inmensa fauna y flora del lugar y el día a día de la comunidad Kichua. Participaron en varias “lectures” impartidas por los especialistas de cada área y ayudaron en la recogida de datos y reconocimiento de especies salvajes.
La segunda semana se trasladaron a las Islas Galápagos, donde pudieron visitar túneles de lava , el centro Charles Darwin de investigación y bucear rodeados de leones marinos , pequeños tiburones , mantas raya y una infinidad de distintas especies de corales, algas y peces.
“La experiencia es un verdadero reto a nivel no solo físico e intelectual, sino también emocional en un entorno inigualable. Ves cómo tus alumnos trabajan en equipo y aprenden junto a otros alumnos de distintos países. Todos ellos sumergidos en una realidad muy diferente a la que están acostumbrados”, explica Maila Piconi, docente de las Chapas-Ecos que ha acompañado a los estudiantes en esta aventura.
Hace un año la expedición se realizó en Indonesia. “En ambos casos esta aventura permite que nuestros alumnos consigan ampliar su visión de la realidad que le rodea, lo que es prioritario de lo que no , y lo que es necesario de lo superfluo”, afirma Maila. Y termina con la siguiente reflexión:
“Como docente debemos buscar siempre experiencias que amplíen y alimenten las ganas de conocer a nuestros alumnos, llegar a sus corazones y hacerles ver lo que de verdad importa y es necesario”.
