¿Por qué aprender jugando?

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¿Por qué aprender jugando?

¿Por qué aprender jugando? Los niños no juegan para aprender, pero de una manera más o menos consciente aprenden jugando.

En torno a los dos años de vida manifiestan ya una gran capacidad para fantasear, inventar, crear, construir y convertir cualquier acontecimiento de nuestro día a día en juego.

El juego constituye una herramienta innata de aprendizaje, ya que supone una constante interacción con el entorno, con otros niños y con los adultos.

No podemos olvidar que el juego es una actividad mental y física que favorece el desarrollo integral de los niños y les permite ir aprendiendo sin apenas ser conscientes de ello. 

En Guadalimar – Altocastillo con la implantación del Programa de la Escuela Primaria de Bachillerato Internacional el objetivo general es  promover el aprendizaje en entornos dinámicos, atractivos y divertidos; a través de la gamificación que incorpora los elementos esenciales de los juegos para lograr con ello un aprendizaje más significativo. 

Veamos algunos beneficios de aprender jugando:

1. Refuerza los conceptos aprendidos.

La mejor forma de aprender los conceptos es poniéndolos en práctica.

Mediante el juego y la imaginación los alumnos llegan a sus propias conclusiones.

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2. Favorece el Desarrollo Cognitivo

Los procesos cognitivos y las emociones forman un binomio indisoluble y es por ello que en este espacio se pueden trabajar desde contenidos curriculares con un enfoque transdisciplinar, hasta gestión de emociones.

Con el juego se realizan actividades que potencian la memoria y estimulan la curiosidad y el asombro. 

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3. Fortalece las habilidades sociales.

El juego promueve las relaciones entre los niños estimulando entre ellos el compañerismo y el trabajo en equipo.

El aprendizaje mediante el juego conlleva la satisfacción, el autocontrol y se fomentan habilidades como: Sociales, resolución de conflictos, habilidades comunicativas. Aumentando la motivación y la responsabilidad.

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4. La felicidad se aprende

Las redes neuronales se activan cuando estamos contentos y relajados. El juego es una herramienta fundamental que predispone al niño a aprender.

Con el juego el niño vive experiencias placenteras a través de la creación de un mundo de fantasía, cogiendo elementos de la vida real y transformándolos de forma que consigue desconectar.

En Guadalimar – Altocastillo aprovechamos aquello que más les gusta hacer y que más felicidad les aporta para adaptarlo a lo que queremos enseñar y de esta forma garantizamos el exito de aprendizaje.

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