¿Qué se lleva un alumno tras 18 años en el colegio?
La PEvAU 2022 ha finalizado y los alumnos de segundo de Bachillerato de Monaita – Mulhacén ya han entrado a formar parte del universo Alumni Attendis. Se hace difícil pensar que ya no volverán al colegio. Finalizan unos años de convivencia llenos de experiencias y recuerdos que les acompañarán siempre. Lo que se lleva un alumno tras 18 años en el colegio es una mochila llena de herramientas para ser felices y transformar la sociedad.
Monaita – Mulhacén es más que un colegio y lo que se lleva un alumno tras 18 años aquí es mucho más que un buen expediente académico.
Es una forja de amistades y relaciones que duran toda la vida y que vemos crecer con ilusión, año tras año, con cada promoción que se gradúa.
Lo que hay en la mochila de un alumno tras 18 años en el colegio
Los años de colegio son cruciales para el resto de la vida porque ponen las bases de lo que se seguirá construyendo en el futuro.
Hablar de excelencia en los colegios Attendis es hablar del grado completo de desarrollo personal al que cada uno puede aspirar.
Esa es la calidad pedagógica y educativa que Attendis persigue. Para cada alumno y cada alumna. Con la familia. Gracias a sus docentes.
Por eso, la colaboración entre padres y profesores tiene un papel tan importante porque juntos hacen posible que cada alumno consiga ser su mejor versión.
Lo que se lleva un alumno tras 18 años en el colegio es el fruto de un trabajo conjunto -perseverante y lleno de ilusión- entre familia y colegio para conseguir grandes objetivos:
- Descubrir su misión en la vida
- Conseguir sus objetivos académicos para llegar a ser lo que quieran ser
- Ayudar a sus compañeros a cumplir los suyos
- Compartir sus talentos con el mundo
- Preocuparse y ocuparse de construir un mundo mejor
- Respetar y cuidar a sus amigos
- Profundizar en los temas que les interesan y participar en concursos y premios de esos ámbitos
- Leer
- Tener pensamiento crítico
- Ser responsables con sus encargos en casa y hacerlos con una sonrisa para contribuir al buen clima familiar
- Querer a sus padres y agradecerles la oportunidad que les han dado de estudiar en el Colegio
- Llevar una vida saludable
- Hacer deporte
- Conseguir que su vida tenga un sentido trascendente, más allá de las circunstancias materiales e inmediatas
- … ¡¡Ser felices!!
Valores humanos y cristianos, valores para la vida
El proyecto educativo de Monaita – Mulhacén va más allá de la excelencia académica.
Por ello, el día a día del colegio incluye la transmisión de valores humanos y cristianos, importantes valores para la vida como:
- la solidaridad,
- el esfuerzo,
- la generosidad,
- el servicio a la sociedad,
- la búsqueda de la verdad
- y la libertad.
Desde el respeto por todas las creencias, en Monaita – Mulhacén ofrecemos a los alumnos y alumnas una formación cristiana fiel a la doctrina de la Iglesia Católica.
Además, se recogen muchas de las enseñanzas de san Josemaría, fundador del Opus Dei, sobre la familia, el amor al trabajo bien hecho y la preocupación por los demás.
Con todo esto y preparados académicamente con excelencia, los ya Alumni tienen herramientas suficientes para ser felices y transformar la sociedad en la que ya empiezan a vivir como adultos.
Gratitud hacia los profesores por formar personas íntegras
Es momento de agradecer al equipo docente su labor incansable para que cada alumno consiga ser su mejor versión.
A todos los profesores de Monaita – Mulhacén, gracias por cada:
- clase preparada,
- tema explicado,
- duda solventada,
- examen corregido,
- premio presentado,
- tutoría personal realizada,
- tutoría familiar compartida,
- reto superado,
- fracaso remontado,
- oración rezada…
Porque sólo como resultado de estas y de las mil acciones que componen el trabajo diario de los profesores con los alumnos, tras 18 años en el colegio podemos decir ¡misión cumplida!
El acto de imposición de becas, una tradición
Como es tradición, este curso también hemos celebrado los actos solemnes de imposición de becas a los alumnos de segundo de Bachillerato.
Unos eventos académicos en los que participaron los alumnos becados, sus familias y el claustro de profesores.
También asistieron dos invitados de honor que pronunciaron sus conferencias con una impresionante altura humana e intelectual.
En la sede Monaita el invitado destacado fue Alberto del Águila -juez decano de Granada y padre del colegio, también de una alumna de la XLII promoción- quien proclamó una lección magistral en la que apuntó la importancia del esfuerzo personal y el espíritu de servicio para afrontar los retos futuros.
Mientras que en la sede Mulhacén, el ponente fue Alberto Sánchez-Tabernero, catedrático de Empresa Informativa y rector de la Universidad de Navarra desde 2012 hasta 2022.
Sánchez-Tabernero se dirigió especialmente a los alumnos de la promoción XLII para proponerles algunas ideas con las que conseguir plenitud vital.
«Os hago tres propuestas para que vuestra vida sea feliz y fecunda: sed reflexivos, sed generosos y sed esperanzados»
Alfonso Sánchez-Tabernero
Así mismo, los directores del colegio dirigieron unas emotivas palabras a los asistentes para cerrar una de las etapas más importantes de la vida.
Por otra parte, una representación de los alumnos de segundo de Bachillerato leyó la memoria de la XLII promoción, en la que hubo recuerdos entrañables de la infancia y jugosas anécdotas vitales de toda la etapa escolar.
Una tarde de emociones tras 18 años
La imposición de la beca a cada alumno, a cada alumna, fue el momento más solemne de la celebración.
Pero los actos acogieron momentos de gran emoción:
- Muchos padres antiguos alumnos impusieron la beca a sus hijos.
- Otros alumnos recibieron la beca de manos de sus padres, profesores y personal de Attendis.
- Las familias Olmedo López-Frías y García Navarro fueron las protagonistas de un cariñoso homenaje al graduar a las últimas hijas de unas familias en las que todos son antiguos alumnos.
- Los matrimonios encargados de cursos recibieron un homenaje por su labor a lo largo de tantos años.
- La Salve a la Virgen, que como Madre de Dios y Madre nuestra, les seguirá cuidando siempre.
El aperitivo final fue el momento de las conversaciones de todos con todos y de las felicitaciones, de los selfies y los abrazos, del recordatorio de las anécdotas que no habían cabido en la memoria de los alumnos…
Los actos de imposición de becas a la promoción XLII han sido el broche final a una larga etapa -18 años para la mayoría de los alumnos- que ha puesto las bases de lo que se seguirá construyendo en el futuro.
¡Misión cumplida!