Hijos autónomos, hijos felices
Hablar de autonomía personal en los niños es hablar de crecimiento y de felicidad. Un niño autónomo confía en sí mismo, se siente capaz y por eso tiene más posibilidades de conseguir sus metas, tiene iniciativa, lucha por superar retos, es creativo, tiene una autoestima alta… pero la ayuda de los padres en este proceso de crecimiento es esencial. Y aunque enseñar a un niño a ser autónomo desde los 3 años no es una tarea fácil, merece la pena volcarse en ese aspecto de la educación porque los hijos autónomos son hijos felices.
Querer hijos felices pasa por educar hijos autónomos contando en todo momento con el apoyo y la orientación de los padres. La autonomía proporciona seguridad, aceptación y autoestima a los niños.
La autonomía no aparece, se crea. Y son los padres los encargados de educar este importante aspecto del desarrollo de los hijos, aunque el colegio puede ser un gran aliado en este campo.
Por eso, en Monaita – Mulhacén nos adaptamos al ritmo madurativo de cada alumno, personalizando su aprendizaje y manteniendo un contacto estrecho con las familias para conseguir niños autónomos, independientes, felices desde los 3 años.
Nos centramos en cada alumno, analizando la fase madurativa en la que se encuentra y a partir de ahí fomentando los hábitos con un programa de crecimiento específico para él.
Además, nos apoyamos en la metodología del Bachillerato Internacional, para conseguir alumnos audaces que sean autónomos, independientes, felices.
¿Cuándo comenzar a fomentar la autonomía de los niños?
Son muchas las investigaciones que confirman que estas capacidades comienzan a desarrollarse desde los primeros meses de vida.
Pero para que un niño consiga ser autónomo, es necesario que sus padres le ayuden y le den la oportunidad de hacer cosas y tomar sus propias decisiones.
“Ayúdame a hacerlo por mí mismo”
Doctora María Montessori
Lograr la autonomía implica trabajar la propia higiene que el niño debe hacer por sí mismo, el conocimiento que va teniendo de su propio cuerpo, la alimentación y su importancia den el desarrollo, el descanso, etc.
Estas cuestiones son fundamentales para que los menores aprendan a realizar por sí mismos estas tareas de cara a su crecimiento personal y a convertirse en protagonistas de su propio aprendizaje.
Y aunque todo esto es esencial para su crecimiento personal, sin embargo la banda sonora de los hogares recoge frases como estas en determinados momentos:
- «No cojas el vaso, que se va a romper!”
- «Yo te doy para que no te manches»
- “¡Baja de esa silla, que te vas a caer!”
- A este ritmo no te vas a quitar el pañal en la vida…
Y es que para los padres ¡es muy difícil encontrar el punto de equilibrio! A veces hacen todo en lugar del niño. Y otras, en cambio, lo consideran mayor de lo que es y le exigen demasiado.
Autonomía personal de los 3 a los 6 años
La autonomía personal es la habilidad para hacer cosas por sí mismos.
Saberse capaces de hacer cosas por sí solos sin la ayuda de un adulto, les da confianza y seguridad. Se sienten mayores y cada vez exploran más cosas que hacer para ir aumentando su nivel de autonomía.
A partir de los 3 años, los niños son capaces de realizar muchas acciones por sí mismos en diversos ámbitos:
- Comida y conducta alimentaria.
- Higiene y lo referido al autocuidado personal.
- Vestido tanto el uso de prendas como el cuidado.
- Convivencia: la relaciones con las personas.
El secreto de la autonomía de los niños no es más que la repetición de actos cada día y la confianza que les dan los adultos para que comprueben que son capaces de hacer lo que se propongan.
Este proceso de crecimiento en atunomía personal hace que sean más felices.
Por tanto, vale la pena el trabajo de apoyo de las madres y los padres para conseguir el desarrollo de la autonomía personal en la infancia: hijos autónomos, hijos felices.
5 imprescindibles para fomentar la autonomía de tu hijo de 3 años
En una sociedad que sobreprotege, la autonomía de los niños es un reto todavía mayor.
Lógicamente, un niño de 3, 4, 5 años necesita protección y cuidado, pero también necesita independencia y autonomía.
Y somos los adultos los que debemos aprender a dársela. Y esto implica situaciones un poco incómodas, como:
- dejar que alguna que otra vez se caigan al suelo,
- permitirles que mojen el baño cuando se lavan las manos,
- que se ensucien cuando coman…
Una de las claves y autoconceptos infantiles más importantes de la etapa de Educación Infantil es la autonomía.
La experta en Educación Infantil Nieves Fernández estuvo hace unos días en Cope Granada charlando con el periodista Fran Viñuela sobre este importante asunto de la educación de los hijos.
Escucha aquí sus 5 imprescindibles para fomentar la autonomía de los niños de 3 años.
