Un cerebro emocionado aprende mejor
El cerebro sólo aprende si hay emoción y así lo constata la neurociencia. Educación Infantil en Puertoblanco-Montecalpe
Durante estos primeros años, se da un desarrollo rápido en el plano físico, emocional, social y cognitivo. El cerebro y el cuerpo del niño se desarrollan a una velocidad mayor que durante cualquier otro momento de su vida.
Es en la primera infancia cuando también toma forma el desarrollo social, ya que los niños poseen una tendencia natural a explorar, descubrir, jugar y establecer conexiones consigo mismos, con los demás y con todo lo que los rodea. A través de estas interacciones, los niños forman su propia percepción y la de los demás en el mundo.
Enseñar con emoción
Un niño comienza a aprender desde el mismo momento del nacimiento, incluso antes. El funcionamiento del cerebro demuestra, que solo se puede enseñar y aprender aquello que se ama. No se trata solo de fomentar las emociones en el aula, sino más bien de enseñar con emoción; despertando la atención y aprovechando la curiosidad natural del niño. Mostrando cada cosa o concepto como «interesante» e incitando así al alumno a querer conocer más.
En la etapa de Educación Infantil de Puertoblanco-Montecalpe de este modo la indagación, el juego como motor y el papel del profesorado se sitúan en el centro de la metodología.
El papel de la indagación
Los niños son indagadores por naturaleza, el alumno es participante activo de su propio aprendizaje convirtiéndose la indagación en el centro de la metodología que se desarrolla en el Programa de la Escuela Primaria (PEP) del Bachillerato Internacional (IB)* que Puertoblanco-Montecalpe está implementando desde los 3 a los 12 años.
El aprendizaje significativo es el que no se olvida, se adquiere por las experiencias exploratorias y representativas de manera informal, ellos no se dan cuenta de que están aprendiendo y que están adquiriendo conocimiento, piensan que «solo están jugando».
Preschool 0 años Preschool 1 año Preschool 2 años
Nuestros alumnos aprenden haciendo «Learning by doing«. Mediante experiencias directas se convierten en los protagonistas de su proceso de aprendizaje.
Como explica Zuleika Cruz, Asesora de Programas Internacionales de Attendis
«El niño, por naturaleza, es curioso, le interesa todo lo que lo rodea y se pregunta acerca de los fenómenos que ve. Esta cualidad es fundamental en el PEP, porque nace de las nociones que los pequeños tienen sobre la naturaleza de las cosas. En otras palabras, los niños están preparados para conocer cada vez más el mundo al que han venido a vivir, porque su interés por el mismo es totalmente auténtico, los motiva a aprender y mantendrán este interés durante toda su vida si logramos que participen activamente del proceso de aprendizaje. Los maestros en el PEP saben que el éxito depende en gran medida de la toma de iniciativa de los niños en la indagación, si son ellos los que deciden el tema, el problema, el método y las conclusiones en la indagación, el aprendizaje con sentido se abrirá paso.»
El juego como motor
Para el alumno de infantil, por sus características, su día a día, el mundo, la vida es un juego continuo, sin interrupciones.
En cualquier situación, en cualquier lugar y circunstancia van a encontrar la forma de iniciar un juego nuevo.
Ya decía Albert Einstein que el «juego es la forma más elevada de investigación», porque en él los niños realizan interpretaciones, interacciones, aprendizajes, elecciones, actúan según sus intereses, se dan a conocer, construyen significado y todo ello incide directamente en la adquisición de conocimiento y en su desarrollo integral.
El juego es el motor de aprendizaje, ya que los aprendizajes más importantes de la vida en estas edades se realizan jugando. El juego es como «la puerta al conocimiento».
Las profesoras como guías
En Educación Infantil en Puertoblanco-Montecalpe se crean experiencias reales de aprendizaje, que ponen a disposición del alumno múltiples oportunidades para la exploración y para que descubran por ellos mismos. Las profesoras son guías y facilitadoras del aprendizaje, ahora conducen, acompañan, observan, documentan, facilitan ese interés por indagar e intentan provocar un conflicto cognitivo en ellos.
Un cerebro emocionado aprende mejor
Cuando uno está disfrutando, aprende mucho mejor. El cerebro de un alumno emocionado es el que mejor aprende.
*Puertoblanco-Montecalpe son centros solicitantes del Programa de la Escuela Primaria (PEP) del Bachillerato Internacional (IB).